Sostenible, saludable y educativo: la revolución del comedor escolar

Los comedores escolares no son ajenos a los cambios y retos de la sociedad. Tanto madres y padres, como los propios centros, dan cada vez más importancia a un espacio que está destinado a integrarse en la estrategia educativa. Esa es la visión de Jardanay desde que comenzamos con este proyecto. Nuestro objetivo es mejorar el bienestar de niños y niñas a través de unos menús preparados con mimo y de la educación alimentaria y de convivencia durante el tiempo que están con nosotros en el comedor. Por ello, prestamos especial atención a las tendencias en un trabajo de actualización que debe ser constante, para ofrecer de forma continua un servicio idóneo y adaptado a las necesidades del alumnado y de la sociedad en la que vivimos.

Con una mayor conciencia sobre la importancia de una alimentación saludable o el consumo de proximidad, las tendencias en los comedores escolares están evolucionando rápidamente. En esta entrada analizamos las corrientes más importantes en los comedores escolares en el año 2023 y cómo éstas pueden mejorar la experiencia de comer en la escuela. ¿Cómo será el comedor escolar del futuro?

Alimentación saludable

Una alimentación saludable es esencial para el bienestar físico y mental de los/as estudiantes. El suministro de alimentos nutritivos al alumnado puede ayudar a mejorar su rendimiento académico, su concentración y su energía y además es esencial para que su desarrollo sea adecuado en un momento crítico para su crecimiento.

Esta visión es cada vez más compartida tanto por las comunidades educativas como por las familias, que observan y exigen que los comedores escolares sean ejemplo de buena alimentación, basando los menús en alimentos ricos en proteínas, vitaminas y minerales y bajos en grasas.

Creemos que, en general, esta tendencia ha llegado para quedarse: los comedores escolares ofrecerán opciones de comida más casera, menos procesada y con poca cantidad de aceites. Será tendencia también fortalecer la presencia de proteínas vegetales en la dieta así como ir reduciendo las cantidades de azúcares añadidos y cuidando el aporte de sal.

Será importante también fomentar la educación nutricional entre los niños y niñas para que aprendan a tomar decisiones informadas sobre su alimentación a medida que van creciendo y adopten buenos hábitos alimentarios. En definitiva, la alimentación saludable en comedores escolares es esencial para el bienestar de los/as estudiantes y será una prioridad para los centros educativos, administraciones públicas y familias.

Sostenibilidad

Avanzar hacia una sociedad concienciada en el cuidado y protección del planeta pasa por adoptar prácticas sostenibles en toda la cadena de producción y consumo. En Jardanay hemos apostado siempre por los proveedores de proximidad y continuaremos dando pasos hacia un consumo cada vez más local y cercano. Creemos que -afortunadamente- esta apuesta por lo cercano y sostenible no será exclusiva de nuestra empresa y será una tendencia en el ámbito de los comedores escolares y de la restauración colectiva en general. Al menos así debería ser, a nuestro entender.

El reto de la sostenibilidad no solo pasa por el uso de alimentos orgánicos y locales o la incorporación de utensilios y envases reutilizables, medidas que favorecen la reducción de la huella de carbono. La educación de los/as más pequeños/as en áreas complementarias a la alimentación como es la lucha contra el desperdicio alimentario es fundamental para asegurar un futuro saludable para nuestra sociedad y nuestro planeta.

Es fundamental fomentar la sostenibilidad entre el alumnado. La organización de talleres educativos, la creación de huertos escolares o la colaboración con granjas locales, son acciones que se convertirán en una prioridad para los centros educativos y que formarán parte del currículo académico en los colegios.

Alimentación personalizada

La oferta de alimentación para el alumnado será cada vez más personalizada y adaptada a cada caso específico. Propuestas de menú sin gluten, lactosa o adaptadas a necesidades dietéticas individuales serán importantes para garantizar que todos los/as estudiantes reciben una dieta adecuada y adaptada a sus circunstancias.

Las alergias e intolerancias alimentarias deberán tenerse muy en cuenta a la hora de diseñar menús. Necesidades especiales que suponen adoptar estrategias y protocolos que garanticen la máxima seguridad alimentaria y bienestar de todos los niños y niñas.

 Espacio educativo

Si has llegado hasta aquí ya habrás entendido que, sin duda, esta es una de las tendencias más importantes en los comedores escolares. En Jardanay apostamos por concebir el comedor como una extensión del aula, un espacio educativo donde seguir formando a niñas y niños en cuestiones como alimentación, nutrición, compañerismo, medio ambiente y mucho más.

Cada vez más centros escolares integran el comedor dentro de su estrategia educativa. En los próximos años veremos cómo las familias demandarán servicios de comedor que vayan mucho más allá de la alimentación. El equipo de monitores y monitoras jugarán un papel fundamental, convirtiéndose en auténticos/as formadores/as que complementen el desarrollo académico y humano del alumnado.

En conclusión, 2023 será un año en el que los comedores escolares darán un salto importante en la apuesta por la alimentación saludable, la sostenibilidad y la educación. Tendencias que llegan para mejorar el bienestar de nuestros/as pequeños/as y que en Jardanay llevamos poniendo en práctica desde nuestros primeros pasos.